El ansiado clímax de esta popular trilogía literaria erótica finalmente hace su arribo a la pantalla grande, nuevamente bajo la dirección de James Foley, quien tomó la batuta desde la cinta anterior, y con la participación de Dakota Johnson y Jamie Dornan, volviendo a interpretar los personajes que los lanzaron al estrellato hace tres años. Fifty Shades Freed (Cincuenta Sombras Liberadas) es el título de este tercer y último capítulo, basado en la novela homónima de E.L. James.
Fifty Shades Freed da inicio con el esperado enlace matrimonial entre Anastasia Steele y el magnate Christian Grey, al ritmo de la pegajosa melodía pop Capital Letters a cargo de Hailee Steinfeld. Posteriormente acompañamos a la pareja de recién casados en su viaje de luna de miel alrededor del mundo, en el cuál comienzan a aflorar algunos de los conflictos que luego se convertirán en el motor principal de la historia en esta tercera entrega.
Christian y Anastasia deben interrumpir sus increíbles vacaciones por el Mediterráneo para regresar inmediatamente a la lluviosa ciudad de Seattle. Resulta que un misterioso hombre ingresó a la compañía del multi-millonario burlando todas las medidas de seguridad, apoderándose de valiosa información. Pronto conoceremos la identidad del perpetrador, quien busca hacerle daño físico a los enamorados con tal de saciar su sed de venganza. A la par de todo esto, la vida en el lujoso penthouse no es miel sobre hojuelas. Tanto Christian como Anastasia deberán aprender a controlar sus arranques de celos, y a descubrir el balance adecuado sobre quién posee el poder en la relación.
Si bien la segunda parte de la trilogía (Fifty Shades Darker) logró bajar el nivel de calidad y de interés de su antecesora, en esta ocasión vuelve a ocurrir lo mismo, posicionando a Fifty Shades Freed como la entrega más floja de la saga cinematográfica. Nuevamente los conflictos son casi inexistentes, y apenas se nos presenta uno, éste se resuelve en cuestión de minutos. Incluso el clímax de esta tercera parte, el pago de un rescate millonario, es filmado con absoluta pereza y concluye de forma súbita. No se si sea solamente mi percepción, pero hasta las actuaciones de Dakota Johnson y Jamie Dornan carecen de la misma fuerza y energía que les caracterizó en las dos películas anteriores. Se les nota muy flojos y cansados, como si solamente hubieran regresado para cobrar un cheque y no tanto por el compromiso que tienen con la historia y sus personajes.
El único ámbito en el que Fifty Shades Freed logra superar a la cinta anterior es en cuestión de escenas candentes. Esta tercera parte continúa empujando los límites de la clasificación R, ofreciéndonos momentos más arriesgados de lo que comúnmente observamos en el cine tradicional. Eso sí, aunque el mercado meta de estas películas es el público femenino, resulta un tanto incongruente que cuando se trata de desnudez en pantalla, no existe un balance adecuado y es Johnson quien suele enseñar más piel que su co-protagonista.
Involuntariamente, Fifty Shades Freed se convertirá en una de las comedias más divertidas del 2018. Sus ridículos diálogos y situaciones absurdas, así como sus pésimas actuaciones provocarán más risa que morbo. Si eres de los que ya invirtió tiempo en la relación de Anastasia y Christian Grey, entonces no está de más echarle un vistazo al capítulo final, aunque basta con advertirles de lo abrupto, soso y predecible que es. Con todo y montaje al ritmo de Love Me Like You Do de Ellie Goulding para hacernos recordar los momentos «memorables» de las últimas dos películas.
Es una lástima que lo que en un principio comenzó como todo un fenómeno de taquilla y de cierta forma cultural, reminiscente a lo que en los años setenta cintas como Emmanuelle consiguieron al llevar el erotismo al cine mainstream, haya terminado en algo tan blando y ridículo. Asimismo, Fifty Shades Freed llega a cartelera en medio de las campañas del #MeToo, por lo que incluso su mensaje de sumisión termina sintiéndose fuera de tono con lo que ocurre en el mundo exterior.
Calificación: *
Título original: Fifty Shades Freed (Cincuenta Sombras Liberadas)
Año: 2018
País: Estados Unidos
Dirige: James Foley
Con: Dakota Johnson, Jamie Dornan, Eric Johnson y Eloise Mumford
Solo fui capaz de ver la primera y leerme el primer libro jajj