El cine norteamericano nos ha traido historias que van de la comedia al romance, y del drama hasta el terror para retratar las dificultades de la adolescencia desde la perspectiva de jovencitos preparatorianos. Es un género cinematográfico que tomó gran auge durante los años ochenta y que continúa vigente hoy en día, adaptándose a las modas y tendencias de las nuevas generaciones. La actriz y comediante Greta Gerwig, reconocida en el mundo del cine independiente por sus protagónicos en las películas Frances Ha y Mistress America, ambas co-escritas por ella misma y dirigidas por su actual pareja sentimental Noah Baumbach, nos ofrece un vistazo auténtico de la adolescencia a través de Lady Bird, una comedia semi-biográfica que sirve como plataforma para su debut como directora.
Christine McPherson, quien prefiere que le llamen por su apodo «Lady Bird», es una jovencita de Sacramento, California que se encuentra cursando el último año de preparatoria en un colegio católico dirigido por monjas y sacerdotes. Aunque aún ha decidido qué carrera estudiar en la universidad, de una cosa si está segura: quiere irse a vivir lo más lejos posible, ya que no aguanta el estilo de vida de la ciudad y no soporta la intromisión de su madre. Luego de que la consejera de la escuela le recomienda involucrarse en alguna actividade extra-curricular, la jovencita comienza a descubrir su pasión por las artes escénicas, llevándola a tomar la decisión de querer estudiar en la ciudad de Nueva York.
Lady Bird es una sincera comedia que si bien explora temáticas ya conocidas y masticadas en el cine juvenil, su punto de vista femenino y su gran corazón logran que ésta se distinga del resto de este tipo de producciones. Sin mucha pretensión, Gerwig crea personajes que se sienten reales, con virtudes y defectos como cualquier humano, y cuyos conflictos resultan tan auténticos que nos acercan a ellos, volviéndonos cómplices de sus aventuras, divirtiéndonos con su punzante sentido del humor, y conmoviéndonos hasta las lágrimas al acompañarlos durante su proceso de maduración. Gran parte de la efectividad de la película recae en su guión, uno que evoca la genialidad, inteligencia y sensibilidad que Greta Gerwig mostró como co-escritora de los éxitos independientes Frances Ha y Mistress America. Existe un balance perfecto entre humor y melancolía, de nostalgia y de un espíritu juvenil cargado de rebeldía y compasión.
Sin embargo, también hay que reconocer que un excelente guión no puede funcionar sin el sólido trabajo de sus actores y actrices. Saoirse Ronan es toda una fuerza inquebrantable como Lady Bird. La joven actriz norteamericana de raíces irlandesas nos conquistó hace dos años con su interpretación en Brooklyn. Aquí, Ronan actúa en un papel completamente opuesto al de dicho drama, permitiéndonos observar su talento y su versatilidad. Ronan imprime simpatía, mucha personalidad y un sentido del humor único al personaje protagónico, el cual también esconde un gran corazón detrás de su fachada de aparente rebeldía. Asimismo, Laurie Metcalf, quien da vida a la madre de la jovencita, es simplemente espectacular. Metfcalf interpreta a la madre de familia trabajadora y preocupada por el bienestar de su hija, cuyo temperamento y forma de ser termina chocando constantemente con el de Lady Bird. En el fondo, ésta siente un amor incondicional hacia su hija, pero no siempre sabe cómo expresárselo. Metcalf y Ronan tienen varios enfretamientos durante la cinta, y la química entre ambas actrices es extraordinaria. Los jovencitos Lucas Hedges y Timothée Chalamet, y Tracy Letts hacen un formidable trabajo y complementan el reparto masculino de esta encantadora comedia.
Lady Bird reafirma la postura de Greta Gerwig como una voz fresca y talentosa dentro del cine independiente norteamericano. A pesar de que ambos manejan un estilo visual muy diferente, Gerwig me recordó mucho al canadiense Xavier Dolan, en que ambos logran crear personajes y situaciones inspiradas en sus propias vidas, y que cada vez que lo hacen, demuestran una técnica muy particular que inmediatamente hace que conectemos con ellos y con sus historias en un nivel más íntimo y personal. Un grandioso debut lleno de momentos memorables y cómicos que seguramente se convertirá en la plataforma de lanzamiento de su directora a las grandes ligas de Hollywood.
Calificación: ****
Título original: Lady Bird
Año: 2017
País: Estados Unidos
Dirige: Greta Gerwig
Con: Saoirse Ronan, Laurie Metcalf, Lucas Hedges, Timothée Chalamet y Tracy Letts