Todos llevamos dentro de nosotros una bestia reprimida, que ha ido alimentándose por años de nuestros miedos, y que en ocasiones resulta casi imposible dominar. Bajo esa premisa es que el director Michael Pearce nos presenta su ópera prima Beast (Secretos Ocultos), un drama con elementos de thriller que explora el noviazgo entre Moll y Pascal, dos jóvenes pertenecientes a distintas clases sociales que están dispuestos a desafiar las normas de su comunidad con tal de encontrar la felicidad que tanto han anhelado.
La actriz Jessie Buckley es toda una revelación en Beast. Ella interpreta a Moll, una introvertida chica que durante años ha vivido bajo el estricto control de su madre. Fastidiada por el festejo de cumpleaños que su familia de clase acomodada le organizó, la protagonista escapa a un bar local para bailar y tomar unos tragos. Por la mañana, Moll y un chico que conoció la noche anterior pasean por las playas y por los acantilados de la isla de Jersey, al sur de Inglaterra. De pronto, el desconocido realiza un avance sexual no deseado sobre Moll que termina en una serie de forcejeos. Finalmente, un chico rubio con aspecto sucio y desaliñado aparece en escena portando un arma de cacería. Su nombre es Pascal, y éste se convierte en el salvador de la chica en peligro.
La atracción entre Moll y Pascal es casi inmediata. Pero más allá del deseo carnal, los dos comparten heridas emocionales que los han llevado a sentirse ajenos y extraños al mundo que les rodea. La familia de la protagonista se opone al noviazgo debido a la diferencia social que existe entre ambos. Decidida a encontrar la felicidad lejos de su familia, Moll escapa junto a Pascal para vivir en medio del bosque. Sin embargo, su relación será puesta a prueba luego de que la policía local señala al chico como el principal sospechoso de una serie de asesinatos que han conmocionado a los habitantes de la isla.
Acompañado de un fantástico trabajo de fotografía, el director y escritor Michael Pearce nos ofrece una cautivadora historia que va atrapándonos poco a poco, envolviéndonos en una atmósfera de suspenso que logra mantenerse justo hasta antes del momento final. La química entre los dos protagonistas ayuda al desarrollo y a la credibilidad del relato. Jessie Buckley nos recuerda demasiado a Florence Pugh en Lady Macbeth, una de nuestras revelaciones del 2017. Al igual que Pugh en dicha cinta, Buckley se convierte en la fuerza y el motor principal de Beast, y logra transmitirnos el dolor y la desesperación de un personaje que ha sufrido el rechazo y el acoso de la misma sociedad desde su adolescencia.
Pese a todo ello, nos pareció que Beast batalla en elegir el mejor desenlace para la historia que se nos fue presentando. Hay al menos un par de momentos que pudieron haber funcionado como el perfecto final, con todo y algo de ambigüedad. Sin embargo, Pearce opta por una conclusión que nos dejó con un mal sabor de boca. Es un final confuso que se siente ajeno al resto de la narrativa de la película. Aún con ese pequeño detalle, Beast es un filme al que vale la pena echarle un vistazo. Al menos por la actuación de su actriz protagónica, y por sus fabulosos paisajes.
Calificación: ***
Título original: Beast (Secretos Ocultos)
Año: 2017
País: Inglaterra
Dirige: Michael Pearce
Con: Jessie Buckley, Johnny Flynn, Geraldine James y Trystan Gravelle
Cine Sin Fronteras 