Alex Garland, director del aclamado filme de ciencia ficción Ex Machina, es el responsable de llevar a la pantalla grande Annihilation (Aniquilación), película basada en el libro homónimo de Jeff VanderMeer, el primero de una trilogía titulada Southern Reach de la cual los estudios Paramount han comprado los derechos de adaptación al cine. Más allá de presentarnos una fiel interpretación del material original, Garland decide tomar varias libertades narrativas con tal de acercarla a su propio estilo cinematográfico, y plasmar una serie de cuestionamientos sobre la vida, la muerte y el matrimonio.
Natalie Portman interpreta a Lena, una ex-militar convertida en bióloga, quien recibe la inesperada llegada de su esposo Kane. Lena había perdido todo contacto con su marido desde hace más de un año, luego de que éste y un grupo de militares participaran en una misión secreta. Convencida de que Kane había perdido la vida, la protagonista estaba intentando re-construir su vida, por lo que el sorpresivo retorno pone su vida de cabeza. Sin embargo, el hombre comienza a convulsionarse, y de pronto Lena despierta en una especie de laboratorio médico con más preguntas que respuestas.
Bajo el cuidado de la psicóloga Ventress (Jennifer Jason Leigh), Lena comienza a indagar sobre la peligrosa misión de su esposo mientras éste convalece inconsciente en cama. Su investigación termina llevándola al mismo lugar en el que se vio por última vez a Kane: The Shimmer, una especie de burbuja tornasol generada por la caída de un cuerpo celeste. Esta misteriosa burbuja continúa expandiéndose, por lo que Ventress invita a la protagonista a formar parte de una expedición, cuyo objetivo consiste en descubrir lo que ocurre dentro de esa zona.
Annihilation es una película con muchas ideas pero con muy pocas respuestas, lo que posiblemente hará enojar a la audiencia que vaya en busca de una narrativa lineal y una clara explicación a lo que vemos en pantalla. La cinta se convierte en una experiencia sensorial, en la que las imágenes y los sonidos tienen mayor peso sobre el guión. Es como si Garland decidiera llevarnos de la mano por una pesadilla terrorífica y sumamente visceral. Hay un par de escenas que no solamente logran tenernos en tensión total, sino que también crean una incomodidad que hace tiempo no experimentábamos con algún trabajo cinematográfico.
El mundo dentro de The Shimmer es uno lleno de mutaciones genéticas entre plantas, animales y seres humanos, lo que permite al director sumergirnos en una saga de ciencia ficción acompañada de efectos especiales. Aunque éstos cumplen con su objetivo, la calidad de los mismos no está a la par de la excelencia que vimos en Ex Machina, cinta que terminó llevándose el Oscar por Mejores Efectos Visuales en su año. Natalie Portman hace un gran trabajo como la científica en busca de respuestas lógicas y racionales, en una dimensión que no respeta las leyes que rigen nuestro universo. Desafortunadamente no podemos decir lo mismo del resto del elenco. Gina Rodriguez, Tessa Thompson y Oscar Isaac apenas tienen material con que trabajar, mientras que Jennifer Jason Leigh se siente demasiado fuera de tono.
A pesar de estos pequeños detalles, Annihilation logró meternos de lleno en un extraordinario y psicodélico mundo que mantuvo nuestra atención de principio a fin gracias a sus múltiples cuestionamientos y ambigüedad. Una experiencia visual y sensorial que funciona como metáfora sobre los cambios internos que uno experimenta con el paso del tiempo y con las pruebas que la vida nos pone enfrente. A veces es la pérdida de un ser querido, o la lucha contra una enfermedad terminal. En otras ocasiones se trata del remordimiento por haberle hecho daño a alguien cercano. Todo este sufrimiento hace que cambiemos, que mutemos, que nos convirtamos en alguien diferente. Cada interacción va dejando una huella en nosotros mismos, algo que se ve claramente en los cambios que el personaje protagónico va enfrentando a lo largo del filme.
El acto final de Annihilation fue el que terminó vendiéndonos la película. Una descabellada mezcla entre el estilo visual de Under the Skin de Jonathan Glazer, con un toque de 2001 de Kubrick. Pese a que Annihilation no logra superar el trabajo previo de Alex Garland como escritor y director, es una experiencia única y bizarra que probablemente los dejará con muchas interrogantes, pero que habrá cumplido con su objetivo de transportarlos a una pesadilla sin escapatoria.
Calificación: *** 1/2
Título original: Annihilation (Aniquilación)
Año: 2018
País: Estados Unidos, Inglaterra
Dirige: Alex Garland
Con: Natalie Portman, Oscar Isaac, Jennifer Jason Leigh, Gina Rodriguez y Tessa Thompson
Natalie 😍
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