Supuestamente inspirada en hechos reales, Winchester (La Maldición de la Casa Winchester) nos transporta hasta «el lugar más embrujado de los Estados Unidos», una enorme casona ubicada en San José, California. El inmueble se caracterizó por estar siempre en constante construcción durante varias décadas, y el proyecto quedó inconcluso luego de la muerte de su propietaria Sarah Winchester, viuda y heredera de los fusiles semiautomáticos que llevaban el mismo apellido de su difunto esposo.
Luego de la muerte de su esposo y de su hija, Sarah (la ganadora del Oscar Helen Mirren) se recluyó en su enorme mansión para apartarse del mundo exterior. Pese a ello, la viuda continuaba siendo dueña mayoritaria del fructífero emporio familiar. Es entonces cuando la compañía pide la ayuda del doctor Eric Price (Jason Clarke), especialista en psiquiatría, para que éste obtenga una completa evaluación psicológica de la protagonista, la cual permita descifrar si ésta se encuentra en condiciones para continuar al mando del negocio.
Atormentado por los fantasmas de su pasado, el doctor Price comenzará a ser testigo de sucesos paranormales que ocurren en punto de la medianoche, borrando la línea que existe entre la ilusión y lo real. Poco a poco, los espíritus que visitan la casa tomarán mayor fuerza, poniendo en riesgo la vida de quienes habitan en esta escalofriante mansión que pareciera un interminable laberinto lleno de puertas secretas y pasillos sin salida.
Los directores Michael y Peter Spierig (también conocidos como los Spierig Brothers), quienes estuvieron al mando del reciente capítulo de la saga de terror Jigsaw, nos brindan un relato entretenido de suspenso, apoyado por un gran número de jump scares que en un principio resultan efectivos, pero que conforme va avanzando la historia se vuelven más predecibles. La música y los efectos de sonido comienzan a vaticinar la llegada del próximo susto, y los inevitables giros de tuerca no ayudan a la historia en lo absoluto.
Lo mejor de Winchester es sin lugar a duda la presencia de Dame Helen Mirren, a quien estamos acostumbrados a ver en proyectos de mayor prestigio, y no necesariamente en cintas de suspenso de bajo monto con efectos especiales muy pobres (el CGI que utilizan en las tomas externas de la mansión está para morirse, pero de la risa). Su atinada interpretación resulta convincente al retratar la ambigüedad y el misterio que envuelve a la adinerada viuda que bien podría estar perdiendo la cordura como resultado del fallecimiento de sus seres queridos.
Winchester es una película sobre cómo el aferrarnos y no sobreponernos a las tragedias del pasado pueden llegar a arruinar nuestra propia vida, y la de quienes nos rodean. Un desatinado y predecible relato de suspenso que ofrece pocos sustos y efectos especiales muy precarios, pero que compensa sus desaciertos con una formidable actuación de Helen Mirren. Por cierto, si alguna vez se encuentran visitando San José, California, pueden aventurarse a alguno de los tours que se ofrecen por las instalaciones de la verdadera casa embrujada. Eso si que sería un evento escalofriante.
Calificación: **
Título original: Winchester (La Maldición de la Casa Winchester)
Año: 2018
País: Estados Unidos, Australia
Dirige: Michael y Peter Spierig
Con: Helen Mirren, Sarah Snook y Jason Clarke