A primera vista, Love, Simon (Yo Soy Simón) pareciera la típica comedia romántica juvenil americana que captura las altas y bajas de un grupo de adolescentes durante sus años de preparatoria. Sin embargo, detrás de los clichés de dicho género cinematográfico se esconde una historia conmovedora y muy diferente a lo que comúnmente estamos acostumbrados a ver en el cine mainstream. Los fanáticos de series de televisión como Riverdale, Arrow y The Flash (y si nos vamos un poco más atrás, Dawson’s Creek) reconocerán de inmediato el nombre de Greg Berlanti en los créditos de la cinta. Durante casi dos décadas, Berlanti se ha encargado de escribir, crear y producir populares shows juveniles para diversas cadenas de televisión abierta en los Estados Unidos. Luego de casi ocho años de ausencia en la pantalla grande, éste regresa al cine para dirigir la adaptación del best-seller juvenil Simon vs. The Homo Sapiens Agenda de Becky Albertalli.
Simon (Nick Robinson) es un chico de 16 años que cursa la preparatoria, y quien divide su tiempo libre entre salir con sus amigos y disfrutar de reality shows junto a sus padres y su hermana menor. Uno creyera que el protagonista está secretamente enamorado de su amiga de toda la vida Leah (Katherine Langford del show de Netflix 13 Reasons Why), y que la cinta girará en torno a su romance. Pero no es así. Resulta que Simon guarda un secreto: es gay. Lo sabe desde hace años cuando se enamoró instantáneamente de Daniel Radcliffe en Harry Potter, pero éste ha decidido permanecer dentro del closet por temor a defraudar a sus seres más cercanos.
Sin embargo, la vida de Simon está a punto de dar un giro completo luego de que un compañero de la escuela decide «outearse» de forma anónima en un sitio de chismes al mero estilo de Gossip Girl. El chico deja su correo electrónico y Simon le escribe para contarle que él también está pasando por lo mismo. Poco a poco, la relación virtual entre Blue y Jacques, seudónimos que ambos utilizan en sus conversaciones por Internet, se convierte en algo más que una amistad, empujando al protagonista a descubrir la verdadera identidad de su media naranja.
Debo confesar que la primera mitad de Love, Simon me pareció de lo más convencional y hasta forzada. Las actuaciones de los chicos no me convencían del todo, y el humor de Tony Hale (Veep, Arrested Development), quien interpreta a uno de los directivos de la escuela me parecía muy over the top. A pesar de todos los clichés habidos dentro del cine juvenil y de historias de coming of age, la película comienza a romper los patrones de dicho género cinematográfico durante la segunda mitad, entregándonos una historia conmovedora y con un gran mensaje para todo el público, pero especialmente para aquellos que, como su protagonista, viven en secreto escondiendo su verdadera identidad.
La película aprovecha la oportunidad para tocar temáticas relevantes entre los adolescentes, como lo es el bullying físico y virtual. Pero más allá de enfocarse únicamente en los aspectos negativos de la experiencia de Simon al salir del closet, Love, Simon nos ofrece un sincero relato de aceptación y de hacer las paces con uno mismo. Al final, la cinta me conmovió con su mensaje, me hizo identificarme con las situaciones de sus personajes (pese a que mis años de preparatoria terminaron hace más de 15 años), y terminé encariñándome con su protagonista en su búsqueda por encontrar el amor. Gran parte de ello se debe al carisma y talento de Nick Robinson, a quien habíamos visto anteriormente en cintas como Everything, Everything y el blockbuster Jurassic World. Kudos para Natasha Rothwell, quien se roba los momentos cómicos de la película al interpretar a la maestra de teatro que añora sus épocas en Broadway.
Love, Simon no es ningún masterpiece del cine queer, ni se unirá a los rankings de cintas recientes como Call Me By Your Name, Moonlight o Carol, y la película lo sabe. Estamos ante un producto meramente comercial que va dirigido al público juvenil con la finalidad de entretener y promover mensajes sobre tolerancia e igualdad. En sí, Love, Simon termina por jugar con la fórmula de las comedias románticas juveniles de los años ochenta y noventa, dándole un giro muy adhoc al siglo 21.
Calificación: ***
Título original: Love, Simon (Yo Soy Simón)
Año: 2018
País: Estados Unidos
Dirige: Greg Berlanti
Con: Nick Robinson, Katherine Langford, Alexandra Shipp, Jennifer Garner, Josh Duhamel y Tony Hale
Muy call me by your name me la apunto😀https://mirinconcinefilo.wordpress.com/2018/02/26/todo-el-dinero-del-mundo/